el aire, de noche, es una lástima,
no alcanza para todos
alguien debe postergar su sueño, alguien
debe levantarse y, en el medio de la noche,
tocar la dorada serpiente del corazón
ella va a despertar
entornará los soles de sus ojos
dará su pan, su veneno
la flor del cuerpo abrirá, entonces,
como una mañana
pero no será la mañana:
será su turbia claridad
el simulacro
8 comentarios:
sabes? yo lo dejaría en la segunda estrofa...abrazotes
un abrazo...vuelvo pronto a visitarte
Unos versos para refrendar el simulacro de la realidad.
:)
Hola Elena...que gusto leerte desde aca. Disculpa los acentos ausentes pero el teclado es de la edad de los incas. Te mando un abrazo desde la distancia...nos vemos. Besos
Ale, le estuve dando vueltas a tu opción. Me cuesta resignar los otros versos, aún sin saber, todavía, si le son tan necesarios al poema.
Esperaré, y después lo voy a leer de nuevo.
Besos!
Bueno, Georgia, de acá no me muevo.
Abrazo.
La mitad de eso, Jorge.
Gusto que pases.
Abrazo.
Leti, yo te hacía mandándome un códice por correo, jeje, qué buen viaje amiga.
Besos.
tesperamo a la vuelta, tesperamo
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